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jueves, 28 de marzo de 2013


DIEGO GARCIA DE MOGUER



Diego García de Moguer, como su nombre indica  había nacido en Moguer y se alistó en la expedición que efectuó el descubrimiento del Río de la Plata en 1516, cuya flota fue armada y pertrechada en Lepe, donde residían los padres de Díaz de Solís y sus hermanos. Precisamente el cuñado de Díaz de Solís, Francisco de Torres, fue uno de los componentes de la expedición y tuvo mas suerte que Solís, a quien mataron los indígenas.
Hay algunos historiadores que dicen que era portugués, pero al parecer esto se debe a que estuvo en Portugal ejerciendo como piloto durante algún tiempo.
Según mi amigo Alberto, que es capitán de la marina mercante y sabe mucho de esto, Diego García de Moguer era uno de los mejores pilotos de aquella época, aún cuando era casi analfabeto.
Fue un hombre intrépido y en 1526 se puso al frente de una expedición que salía de Finisterre en Galicia hacia Las Molucas, casi al mismo tiempo de la que patroneaba Sebastián Caboto. Ambas expediciones pretendían llegar a Asia para conseguir especias y sedas.
Diego García tuvo un viaje largo y penoso hasta las costas de Brasil, donde encontró a un portugués, Joâo Ramalho, que había ido en la expedición de Álvarez  Cabral ( descubridor de Brasil) y de él obtuvo información y provisiones, pero al enterarse que por aquella zona había oro y plata, decidió explorar el río Paraguay.
Estando en esa exploración, supo que Sebastián Caboto estaba sitiado por los indios, por lo que decidió acudir en su ayuda y después de las muchas batallas y emboscadas que sufrieron y sin encontrar metales preciosos decidieron , regresar a España en 1528.
Murió Diego García de Moguer en Madrid, según unos autores en 1529, según otros en 1535.
                                                   Ängel   Custodio  Rebollo.

Diego Flores Valdés


Aunque los piratas no llegaban a Buenos Aires, principalmente porque en la entrada del Río de la Plata los bajos  hacían que los barcos encallasen, el célebre Francis Drake pasó hasta el Estrecho de Magallanes ya que quería inspeccionar la zona del Pacifico para planear sus correrías y eso alarmó mucho a los españoles, por lo que la Audiencia de Charcas, el 31 de enero de 1581, envió una carta al Rey informando las nulas defensas que había en la zona  para protegerse de los piratas.
Felipe II ordenó la creación de unos fuertes a cada lado del estrecho, incluso con “una cadena de madera” que lo atravesara de lado a lado para establecer el mas férreo control del lugar. Para ello organizó una armada de 22 navíos, a las órdenes de Diego Flores Valdés, armada que desde el principio fue perseguida por la desgracia e incluso algunos historiadores culpan a Flores de incompetencia.
A estos barcos se le unieron los de Alonso de Sotomayor, que habían nombrado Gobernador de Chile y marchaba allí con sus soldados. Al llegar a Río de Janeiro, se encontraron con Fray Juan de Rivadeneira que en una fragatilla traía a 22 frailes que habían sido atacados por los piratas y abandonados a su suerte..
Después de lo que contaron los frailes y ante el peligro que corrían, además de las naves que tuvieron que abandonar, Alonso de Sotomayor decidió ir por tierra desde Buenos Aires y Diego Flores Valdés dejó los tres barcos que le quedaban en poder de Andrés de Equino, con la orden de que si no había vuelto en mayo se marchase con ellos a España.
Fue posteriormente Pedro Sarmiento de Gamboa, quien logró llegar al Estrecho de Magallanes y consiguió fundar los fuertes, Nombre de Jesús y Real Felipe, en cuyos alrededores los españoles formaron dos bonitos poblados, y trágicamente el hambre los diezmó de tal forma, que cuando llegó en 1587 el Corsario Candish encontró todo lleno de cadáveres en las puertas de las casas o en medio de las calles. Muy pocos se salvaron y fue porque huyeron por la costa buscando algo de comida.
                                       ´Angel Custodio Rebollo

miércoles, 27 de marzo de 2013


ISABEL II


Un personaje de la Historia de España  que, generalmente, a casi todos cae bien es la Reina Isabel II,  que por razones de Estado fue dirigida en su vida, aun cuando ella después encauzó su camino a su conveniencia y vivió, quizás, la vida amorosa mas intensa que ha tenido una soberana española.
Isabel II, es descrita por los diferentes autores de sus muchas biografías, como: “gordezuela, pícara, mofletuda, simpática, poco agradecida, cachonda, enormemente temperamental, piadosa, singularmente apasionada, y otros muchos calificativos que ahora mismo no recuerdo”
Dada su espontaneidad en el trato personal, se cuentan innumerables anécdotas de la hija de Fernando VII y en todas ellas lograba salir airosa, como la que le ocurrió estando en  Comillas jugando una partida de billar y sus invitados procuraban dejar las bolas en la mejor posición para que la reina hiciera carambolas fácilmente. Uno de los presentes comentó en voz alta: “Así se las ponían a Fernando VII” y todo el mundo paró su respiración. La Reina, siguió jugando y dijo: “Y a veces nos la hacía”. Todos respiraron de nuevo.
La lista de amantes de Isabel II es muy larga, hay militares, diplomáticos, nobles y todo lo que le apetecía para recuperarse del mal trago de la boda de Estado, con su primo que era reconocido como homosexual.
Unido a la vida de la reina española, está Miguel Tenorio de Castilla, natural de Almonaster la Real que en 1843 fue gobernador civil de Huelva y después lo fue de Barcelona, Málaga, Zaragoza y Sevilla, entre otras poblaciones. Cónsul General en Jerusalem y Diputado a Cortes por Huelva y Baleares.
En 1856, cuando vivía en Sevilla, murió su esposa Isabel Prieto Tirado, natural de La Palma del Condado, victima de una epidemia de cólera.
En Abril de 1859 fue nombrado secretario particular de Isabel II, cargo que mantuvo hasta el 10 de agosto de 1865, cuando Narváez y O´Donnell tienen enfrentamientos políticos con él y se vio forzado a dimitir, nombrándolo entonces la Reina, Consejero de la Corona, cargo que conservó hasta 1866, logrando O´Donnel que marchara a Berlín.
Desde que fue nombrado secretario hasta su marcha a Berlín, nacieron 3 Infantas (Pilar, 1861.Paz, 1862 y Eulalia 1864).
Resulta curioso que a la Infanta se le pusiera el nombre de Eulalia que es la Patrona de Almonaster y que cuando Miguel Tenorio se retiró de la política se fue a vivir al Castillo de Nymphenburg con la Infanta Paz y su marido, Luis Fernández de Baviera.
Murió en Alemania el 11 de diciembre de 1916 a los 98 años dejando por heredera única y universal a la Infanta Maria de la Paz.

Carmen Llorca en su libro “Isabel II y su tiempo” dice que: ... Isabel II nunca había tenido un amigo tan cerca de sí, tan suyo y tan a su antojo”
                                      Ángel Custodio Rebollo.

LUIS DE CARVAJAL

 

Luis de Carvajal y de la Cueva, nació en 1540 en Portugal, hijo de Gaspar de Carvajal y de Francisca de León, que eran judíos convertidos a la fe cristiana. Siendo muy joven, pasó tres años en Cabo Verde, como contable y tesorero del rey de Portugal en el negocio de venta de esclavos y en 1565 marchó a Sevilla donde tuvo negocios de grano y vinos, hasta que arruinado por la mala marcha de sus negocios, fue para Nueva España en su propio barco.
En 1568, luchó en Tamaulipas contra los ingleses a los que rodeo y venció, por lo que el Virrey Martín Enriquez de Almansa comisionó a Carvajal para abrir un camino entre Panuco y las minas de Mazapil.
Fue después cuando Carvajal viajó a España y negoció con Felipe II la conquista, pacificación y población de lo que sería Nuevo Reino de León, para lo que firmaron un documento en Toledo en mayo de 1579.
Luis de Carvajal reunió para este viaje a familias de diferentes zonas de España. De nuestra actual provincia de Huelva fueron tres familias de San Juan del Puerto las que en 1580 emprendieron la marcha.
Una de las familias estaba formada por Juan Beltrán, hijo de Melchor Martín y Catalina Martín, con su mujer Francisca Hernández y sus hijos Lope y Bartolomé.
La otra era la familia de Andrés Velasco, hijo de Agustín García y Elvira Jiménez, que marchaba con  su esposa, Elvira Beltrán, hermana de Juan Beltrán, cabeza de la familia anterior,  acompañados por su hijo Pedro.
Y la tercera era un hombre soltero, Juan Rodríguez, también natural y vecino de San Juan del Puerto, hijo de Juanes de Unceta y Catalina García.
Todos emprendieron viaje en el barco “ Santa Catarina”, propiedad de Carvajal, aunque cuando pisaron las tierras que iban a conquistar, se desilusionaron ya que no era lo que les habían prometido.
Dominaron en poco tiempo el territorio y fueron fundando poblaciones, que hoy son importantes, como la villa de San Luis Rey de Francia, que hoy se llama Monterrey.
Fue muy cuestionado y entregado a la Inquisición denunciado por Fray Juan de  la Magdalena, condenado, aunque era considerado un hombre cristiano e integro, y murió en prisión agobiado por la tristeza.
                             Ángel Custodio Rebollo

domingo, 24 de marzo de 2013


CONIOS


Si a usted le dicen que tiene cara de “conio”, no creo que le siente muy bien, porque la palabra tiene extrañas similitudes. Pero lo curioso, es que de verdad usted puede tener cara de “conio”, porque los “conios” fueron habitantes en el siglo VIII antes de Cristo de la actual provincia de Huelva y hay la posibilidad de que sean sus ancestros.
¿Pero quienes eran los “conios”?.- Pues era un pueblo, también llamado “cinetes” que habitaba los algarves, la zona que hay en el sur de la Península Ibérica, desde el Cabo San Vicente, ( hoy en el Algarve portugués y parte del Bajo Alentejo), hasta el valle del Guadalquivir,( hoy en Andalucía).
Se sabe poco sobre este pueblo, ya que se han encontrado pocos vestigios, pero grandes autores clásicos como Rufo Avieno, Herodoto y Polibio, indican su origen indoeuropeo o caucasiano y por lo tanto no celta. Los conios se mezclaron en nuestra zona con los turdetanos.
Otros dicen que los conios son de origen del norte de la Península, ya que en Asturias existe un desfiladero que lleva por nombre “Alto del Conio”, pero  nada mas.
Schulten, considera a los “conios” como una de las tribus “Ligures” y según su criterio “ los Ligures son el pueblo original de la Península Ibérica
Su principal población era “Conistorgis”, que en lengua conia significa “Ciudad Real” según refiere Estrabón, pero lamentablemente aún no se ha podido localizar sus rastros. Algunos autores la situan en la zona de la actual Beja, en Portugal, aunque otros apuntan que su situación era en Tartessos y podría ser en la Isla Saltés. También varios pueblos de nuestra provincia aducen que Conistorgis estaba en su actual municipio.
Los “conios” adoraban a un solo dios, llamado “Elohim”, pero se encontraban en una zona de grandes influencias religiosas, tartessicas, celticas, turdetanas y fenicias, por lo que su religión, al parecer, fue absorbida por las otras creencias.
La verdad es que, por el interés que despierta para mi descubrir algo sobre esta tribu, he consultado  muchos textos y lo único que he encontrado es que existe una enfermedad llamada “coniosis” que la produce la inhalación de polvo (en griego “konis”, quiere decir polvo).
                                          Angel Custodio Rebollo

viernes, 15 de marzo de 2013


Aquella nueva provincia

Huelva, durante muchos siglos ha pasado de mano en mano, Conios, Bakries y otros, pero una vez que desaparecieron los árabes de nuestro territorio, pertenecimos al Condado de Niebla y otros diferentes señoríos, hasta que llegamos a 1833, cuando el gobierno  de la regente Maria Cristina de Borbón, decidió efectuar una división territorial en toda la nación, que encomendó a Francisco Cea Bermúdez, que es la que conservamos desde entonces.
Cuando se estudiaba esta división del territorio unos diputados propusieron como capital de la provincia a Valverde del Camino, por estar en el centro de la misma, pero se desestimó por no tener puerto de mar y ser muy deficientes las vías de comunicación existentes. Por otra parte, Burgos y Mazo, la intentó llevar a Moguer, pero la idea tampoco tuvo éxito. Total que después de muchas deliberaciones, se decidió que fuera Huelva, por su situación geográfica  junto al mar.
Pero en 1804, se creó otra provincia a la que pertenecimos nosotros. Fue un regalo que quiso hacer Godoy a su amante, con la que después contrajo matrimonio,  Pepita Tudó, que residía en Sanlúcar de Barrameda.
Para ello se dictó una Real Orden el 12 de diciembre de 1804, por la que se creaba la “Provincia y Consulado Marítimo de Sanlúcar de Barrameda” y la componían pueblos de las provincias de Cádiz, Sevilla y Huelva.
Desde el principio, Cádiz y Sevilla, se negaron a perder esos pueblos  y establecieron una oposición férrea. Todo se solucionó en  1808 cuando los serios enfrentamientos que hubo en todo el País,  se puso fin al gobierno de Godoy, motivo por el que la nueva provincia no logró sobrevivir.
La capital designada era Sanlucar de Barrameda y los pueblos que formaban la composición de esta provincia según datos que figuran en el Archivo Municipal  eran los siguientes; Lebrija, Las Cabezas, Trebuxena, Chipiona, Villamanrique, Pilas, Hinojos, Alcalá de la Alameda, Chucena del Campo, Manzanilla, Villanueva del Alcor, La Palma, Bollullos del Condado, Almonte, Gibraleón, S. Bartolomé de la Torre, Villanueva de los Castillejos, San Silvestre, Villablanca, Ayamonte, La Higuerita, La Redondela, La Futa, Lepe, Cartaya, S. Miguel del Arca del Buey, Aljaraque, Rincón, Huelva, S. Juan del Puerto, Moguer y Palos.
Una nota dice que se estaban formando núcleos de población para incorporarse a esta provincia en el Rocío y en Torre de Carboneros.
                       Ángel Custodio Rebollo 

lunes, 11 de marzo de 2013


Sebastián Vizcaíno

Cuando leo algo sobre Sebastián Vizcaíno, me pongo a escudriñar para ver si dice algo sobre su lugar de nacimiento, porque en la mayoría de los datos que he visto dicen “lugar de nacimiento desconocido” y otros, ponen simplemente “vasco”.
Yo tengo siempre muy presente lo que hace algunos años me dijo mi amigo Antonio Cabezas, que vivió varios años en Japón, y termino su vida laboral como Catedrático de la Universidad de Kyoto.
Antonio, desgraciadamente ya fallecido, me dijo que en Japón, libros y documentos dicen: Sebastián Vizcaíno, de Huelva, Primer Embajador Español en Japón”.
Por otra parte, y sin haberlo podido confirmar, recuerdo haber leído que el padre de Sebastián Vizcaíno trabajaba para el Duque de Bejar, y vino desde Extremadura a Gibraleón o Huelva, lo que acerca más a lo que en su día me dijo Antonio Cabezas,
¿Pero quien era Sebastián Vizcaíno?. Hay otro dato sin aclarar en su biografía, porque se dice que era hijo natural o medio hermano del virrey Luís de Velasco y Castilla, y si tenemos en cuenta el trato preferencial que recibía por parte de este importante caballero, casi nos atrevemos a afirmarlo..
Se sabe que combatió en batallas de Portugal a la cabeza de una tropa de caballería y después marcho a Nueva España, donde le fueron encomendadas importantes misiones, entre ellas explorar el litoral del Golfo de California, pero tuvo que abandonar porque su tripulación fue diezmada por el escorbuto.
En compañía de Gerónimo Palacio, Fray Antonio de la Ascensión y Fray Andrés de la Asunción, navegaron con tres navíos desde Acapulco hasta el Cabo Mendocino levantando planos y fijando derroteros, que fueron muy útiles hasta principios del siglo XIX.
Como anteriormente había comerciado en Manila y tenia buenos conocimientos de las Filipinas, fue enviado allí, junto con Rodrigo de Vivero, que, según parece, era sobrino del virrey Luís de Velasco.
Viendo la importancia de las mercancías que llegaban a Manila desde Japón y
como había deseos de las autoridades de entablar relaciones con aquel País, Sebastián, fue a Japón con una carta del Rey expresando su deseo que existiesen relaciones diplomáticas entre los dos países, y con un buen numero de regalos, entre ellos un reloj que aún se conserva en el tesoro del templo Toshogu Kuno. Estableció los primeros contactos cuando fue recibido por el  Shogun Tokugawa y posteriormente con el Leyasu, fundador del Shogunato.


La visita tuvo reciprocidad ya que partió una expedición japonesa que llegó primero a Acapulco y posteriormente siguió viaje hacia España, recalando en Coria del Río, en Sevilla.
Posteriormente Sebastián Vizcaíno organizó desde Nueva España dos expediciones a Japón, para localizar las islas ricas en oro y plata, con un resultado negativo ya que la existencia de esas islas era solo una leyenda.
A su regreso se retiró a Sayula para la administración de sus bienes, pero en 1615 tuvo que liderar a las tropas que rechazaron a los corsarios holandeses de Joris van Spilbergen, que intentaban atacar a  Dalagua, para conseguir agua y víveres.
Debido a los importantes servicios prestados a la Corona, fue designado Alcalde Mayor de Acapulco, donde costeó la construcción de una iglesia y desde 1619 se retiró a México, dejando la administración de Sayula a sus hijos.
Murió en la ciudad de México en 1627, aunque algunos autores la sitúan en 1623.
                          Ángel Custodio Rebollo

sábado, 9 de marzo de 2013


EL PRINCIPADO DE ARACENA

Aracena ha sido una población de mucha importancia, tanto en la época de pertenencia a la provincia de Huelva, como en épocas anteriores e incluso cuando formó parte, como muchas poblaciones del norte de nuestra sierra, del Arzobispado hispalense.
Se cree que los primeros asentamientos humanos en la zona de Aracena tienen origen en la prehistoria, aunque ya fue en la invasión islámica cuando se construyó una fortaleza para defender la zona y sobre sus restos se erigió el Castillo que tras la conquista cristiana fue cedido a la  Orden del Temple
El rey Sancho II de Portugal, puso sus miras en ella para incluirla en un futuro Alto Algarve, pero Fernando III el Santo y Alfonso el Sabio, intervinieron para evitarlo e hicieron que pasara en 1258 a formar parte de Sevilla, como tierra realenga de Castilla.
Después de ser confirmada en su posesión a Castilla por el Tratado de Alcañices, Aracena, (que era en aquella época la jurisdicción mas poblada de la actual provincia de Huelva), se constituye en Real Priorato en el siglo XIV, dependiente de la corona, hasta que en el siglo XVII la enajenan del patrimonio real.
Todo sigue así, hasta que en 1640, Felipe IV, para premiar al Conde Duque de Olivares, le concedió el Señorío de Aracena por sus excepcionales servicios en la batalla de Fuenterrabía.
Y después de la muerte del Conde Duque, en 1645, pasó a pertenecer al Conde de Altamira, que también poseía en aquellos momentos los títulos de Marqués de Astorga y de Ayamonte.
El Conde de Altamira confundió, no sabemos si por error o con “sana” intención, la descripción de Priorato, “ que es el distrito o territorio en que tiene jurisdicción el Prior”, con un Principado, que tiene otra, y se convirtió por intitulación  en Príncipe de Aracena, y por lo tanto Aracena ya no era un Priorato, sino un Principado.
Este titulo de Príncipes de Aracena, lo mantuvieron los Condes de Altamira hasta que desapareció en 1812.
En 1833 con la nueva división administrativa que tuvo todo el País, Aracena fue segregada de Sevilla, para pasar a formar parte de la provincia de Huelva.
                                                    Ángel Custodio Rebollo

jueves, 7 de marzo de 2013


BARROSO


Cuando leo Barroso, mi segundo apellido, siempre intento averiguar si quien lo tiene puede estar vinculado, aunque sea en la lejanía, a mis ancestros. Pero esta vez, el personaje que lleva el apellido fue de Ayamonte y el primer Barroso que he localizado en los archivos parroquiales de San Juan del Puerto, donde nació mi madre, procedía de la ciudad fronteriza, pero como era allá por el siglo XVII o XVIII, y en aquellos tiempos muchos cambiaban sus apellidos, difícilmente, puedo seguirle la pista. El origen de este apellido es el norte de Portugal, por lo que no es extraño que lo encontrásemos en Ayamonte.
Esta vez el Barroso que me encontré había nacido en Ayamonte,  se llamó Benito Alonso Barrozo, con “z”, y era “Capitán de mar y guerra nombrado por Su Majestad el Rey y de las maestranzas de la Armada de Barlovento en la carrera de Indias”.
Benito había escrito en el año 1689 el primer libro de “Derroteros de Indias”, y sus descripciones,  dicen los expertos se han estado utilizando durante cientos de años y aún hoy se mencionan como ejemplo de perfección con los medios que entonces tenían para realizar su trabajo los Pilotos del Mar.
El libro fue dedicado a Luís Manrique de Zúñiga, Marqués de Ayamonte y Conde de Lepe y en él se recogen interesantes datos sobre las rutas existentes entonces para llegar a las Indias, que el autor había recopilado en los viajes que realizó al continente americano.
El manuscrito se encuentra actualmente en Londres, en el Museo Británico, en la sala correspondiente a este tipo de libros y todas los que han logrado verlo elogian la perfección de la descripción  geográfica que hace Benito Alonso Barrozo, de todas las rutas, considerando sus diseños eminentemente prácticos.
A este experto piloto ayamontino, le siguieron otros muchos, como Juan Estévez, Juan Gayón, Jerónimo Martínez, todos naturales de Ayamonte, aún cuando, por razones obvias, trasladaron su residencia a Sevilla o a los pueblos costeros de Cádiz, para estar mas cercanos a la Casa de Contratación.
                             Ángel Custodio Rebollo

LOS PRIMEROS EMIGRANTES

Desde la costa de Samaná y cuando se encontró Colon de nuevo con Martín Alonso Pinzón, el Almirante decidió partir de regreso a Castilla, lo que iniciaron el 16 de enero de 1493.
El viaje fue tranquilo hasta que llegaron a la altura de las Islas Azores, donde entre el 12 y 15 de febrero donde una fuerte tormenta sorprendió a los dos barcos, viéndose obligado Martín Alonso Pinzón a separarse con la Pinta y llegar a Bayona, en la provincia de Pontevedra. Colón soportó otra tempestad el 4 de marzo cuando estaba cerca de Lisboa, lo que le obligó   a hacer escala en Portugal y el 15 de marzo, capitaneando la Niña, hizo su entrada triunfal en Palos de la Frontera.
El Almirante emprendió viaje a Barcelona donde se encontraban en aquellos momentos los Reyes Católicos, para dar cuenta del Descubrimiento y presentarle los regalos exóticos que les había traído
El recibimiento a Colon por parte de los Reyes estuvo rodeado de todo el boato que el momento exigía que fue mostrando todos los frutos de la tierra y animales hasta ahora desconocidos aquí que había traído de América y para final presentó a los reyes a seis indios tainos que habían aguantado un viaje de tres meses y que estaban adornados con collares de perlas y narigueras y pulseras de oro.
 Como era preceptivo fueron convertidos al cristianismo y bautizados; uno, con el nombre del  Rey, Fernando de Aragón; otro con el nombre del hijo de los reyes, Juan de Castilla y el tercero, como el hijo del Almirante, Diego Colón. De los tres restantes no se conoce el nombre que les pusieron, pero si se sabe que fueron admitidos en la fe católica.
Por lo tanto, fueron estos los primeros emigrantes de Hispanoamérica que llegaron a nuestro País.
                                                 Angel Custodio  Rebollo.

       JEAN   COUSIN

Siempre ha existido en muchas partes del mundo, quienes abogan por demostrar que  Cristóbal Colón no fue el descubridor de América, y que muchos estuvieron antes que él en ella, pero ha sido algo que nadie fue capaz de probar de forma fehaciente. El final de estas elucubraciones, es decir que directa o indirectamente, Colón fue informado de la existencia de un nuevo continente. Algo que nos parece posible pero, hasta ahora, ha quedado en la leyenda.
Hace unos días, cayó en mis manos un trabajo del capitán de la marina real británica J.W.Gambier,   sobre  una expedición que dice partió en 1488 de Honfleur, un pequeño puerto de Normandía cercano a Le Havre, capitaneada por un francés llamado Jean Cousin y acompañado por un español llamado Vicente Pinzón, en edad y servicio náuticos  mucho mas antiguos que Cousin, buen marinero, aunque rutinariamente formado.
Dice Gambler, que descubrieron las costas del Brasil, pero los enfrentamiento en la travesía entre Cousin y Pinzón, fueron muy fuertes y nada mas llegar a puerto, el español abandonó el barco. Cuando llegó a Palos, contó lo ocurrido a Colón y de ahí surgió el gran viaje de 1492.
El artículo de Gambler quedó en el olvido, porque se demostró que el viaje de Cousin a Brasil se hizo en 1505 y ya entonces estaba descubierta América.
Aunque aún no conocía el relato de Gambler, el pasado año estuve en Honfleur y lo único que me enteré, es que después del descubrimiento de América, un grupo de franceses había salido de allí para las costas de Brasil en la primera década del siglo XVI habiendo sido una expedición muy provechosa.
                                Angel Custodio  Rebollo

lunes, 4 de marzo de 2013


De Lepe para América


Aparte de Palos de la Frontera, de donde partieron las tres carabelas de Cristóbal Colon el 3 de agosto de 1492, si hay un pueblo vinculado a la colonización en América ese es Lepe. De Lepe fueron muchas familias, unos como soldados, otros como comerciantes o mercaderes y los mas como colonos.
Por eso, si sus ancestros iniciaron su andadura desde Lepe, puede que estos datos les sean de utilidad. El archivo que transcribo a continuación  comprende desde el año 1511 hasta el 1555 y es como sigue:
La primera que tengo es una mujer, ANA DIAZ, viuda de Diego Sánchez, tonelero, hija de Juan Mercader y de Isabel Bernal, vecinos de Lepe y que marchó el 8 de marzo de 1511.
Al año siguiente, el 29 de marzo, partió DIEGO MARTINEZ, calafate, hijo de Diego Martínez, también calafate y de Violante Rodríguez; que iba acompañado de su hijo DIEGO, todos vecinos de Lepe.
El 8 de abril de 1512 fue el hijo de Alonso de Molina, llamado DIEGO DE MOLINA, vecinos de Lepe.
ALONSO GOMEZ, vecino de Lepe, hijo de Hernán Gómez y de Catalina González, embarcó el 15 de diciembre de 1512
Otro Alonso, ALONSO MARTIN DE LEPE, hijo de Alonso Sánchez y de Catalina Martín, vecinos de Lepe, se fue el 15 de marzo de 1513.
ISEO HERNANDEZ y MARGARITA GONZALEZ, hijas de Sancho González y de Teresa Rodríguez, vecinas de Lepe, lo hicieron el 30 de septiembre de 1513.
Un grupo formado por FERNANDO ALIAS y ALONSO ALIAS, su hijos, vecinos de Gran Canaria y FRANCISCO QUINTERO, de Lepe, hijo de Juan Quintero y ANTONIO GONZALEZ, también de Lepe, fueron autorizados el 28 de agosto de 1516.
El 23 de septiembre de 1516, embarcaron dos vecinos de Lepe, JUAN RODRIGUEZ, que estaba casado con Isabel González y su hijo ALONSO MATEOS.
Y el 30 de septiembre de 1516, embarcaron PEDRO DE LEPE, hijo de Hernán Gómez Raposo y de Catalina González, que iba acompañado de su sobrino HERNANDICO, hijo de Martín de los Ríos y de Sancha Guerrera, todos vecinos de Lepe.
Ya en 1517, el 19 de mayo, marchó el hijo de Catalina Alonso, él natural y vecino de Lepe, JUAN ALONSO.
El 18 de agosto de 1517, fue autorizado de nuevo HERNANDO, hijo de Martín de los Ríos y de Sancha Guerrera.
CRISTOBAL DE JAEN vecino de Lepe, y su mujer MAYOR GARCIA, embarcaron el 24 de julio de 1528.
JUAN DE FLORES, natural de Lepe, hijo de Pedro de Flores y de Leonor Hernández, lo hizo el 20 de abril de 1529.
Formando parte de la Armada de Cartagena, partió LOPEZ MARQUEZ, hijo de Francisco de Córdoba y de Ana Márquez, natural de Lepe, el 10 de julio de 1534.
El 12 de octubre de 1534, fueron autorizados para embarcar y para formar parte de la expedición de Diego de Almagro, al Perú, HERNANDO VALLERINO, vecino de Niebla, ALONSO MICHEL, vecino de Cáceres, y GARCIA BRAVO, FRANCISCO VALLADOLID, MARTIN TOSCANO y JUAN DE BREO, vecinos de Lepe. 
El 20 de junio de 1535, JUAN DE ABREU, hijo de Francisco Carrasco y de Elvira de Abreu, vecinos de Lepe, fue autorizado para embarcar con destino a Nombre de Dios.
                                    
FRANCISCO PEREZ, natural de Lepe, hijo de Alvar Pérez y de Juana Ramírez, fue a Nueva España el 2 de octubre de 1536.
LUIS DE SOLIS, hijo de Juan de Solís y de Ana de Torres, natural de Lepe, a Nueva España, el 9 de octubre de 1536.
En 1538, el 27 de febrero, embarcó para La Florida, el vecino de Lepe, HERNÁN BRAVO, hijo de Fernando Villarreal y de Marina Brava.
De nuevo hay una autorización de embarque a nombre de LUIS DE SOLIS, hijo de Juan de Solís y Ana de Torres, vecinos de Lepe, para marchar a Nueva España el 25 de junio de 1538.
A finales de 1538, el 13 de diciembre y con destino a Nueva España, marchó JUAN DE CONTRERAS, vecino de Lepe, hijo de Hernando Esteban y de Ángela Rodríguez.
Ya nos encontramos en 1539, y el 5 de enero y para ir a Nueva España fue autorizado JUAN RODRIGUEZ, vecino de Lepe, hijo de Francisco Rodríguez y de Catalina Delgado.
El también vecino de Lepe, JUAN DE MORALES, hijo de Bartolomé de Morales y de Mayor Álvarez, lo hizo el 26 de septiembre de 1539, con destino a Nueva España.
Otro JUAN DE MORALES, pero éste hijo de Hernán Gómez y de Catalina Díaz, marchó a México el 17 de octubre de 1539.
El 20 de febrero de 1540, marchó  HERNAN BRAVO, hijo de Hernando o Fernando de Villarreal y de Marina Brava.
Al parecer iban y venían con mucha facilidad, algo que nos resulta difícil de comprender, con lo penosos y peligrosos que eran aquellos viajes.
El 7 de abril de 1540, otro vecino de Lepe, JUAN DE CÓRDOBA, hijo de Juan García y de Elvira Ramírez, partió para Nueva España.
FRANCISCO DE GIBRALEÓN, también vecino de Lepe, hijo de Francisco de Córdoba y de Ana Márquez, fue con destino a Nombre de Dios.
JUAN GOMEZ VAZQUEZ, vecino de Lepe, hijo de Gonzalo Vázquez y de Catalina González, con su mujer ELVIRA MUÑOZ BECERRA y una hija, fueron para Honduras en el año 1554. Como criado de Juan Gómez Vázquez les acompañaba ANTONIO RAMIREZ, también vecino de Lepe e hijo de Juan Gómez y de Ana Ramírez.
Una familia que fue en 1554 para la colonización de Nueva España, fue la compuesta por el vecino de Lepe  FRANCISCO DE CONTRERAS, hijo de Rodrigo Yánez Contreras y de Isabel Alonso y a quien acompañaban su mujer ANA RAMIREZ y sus cuatro hijos.
Y para Honduras, el mismo años, fue otra familia menos numerosa que la anterior, porque solo estaba formada por JUAN MARTINEZ DE VERDUSCO, de Lepe y su mujer JUANA DE ESPINOSA.
En extranjero, pero que era vecino de Lepe, hijo de Andrés de Flandes y de Lucrecia de Grimaldo, llamado MELCHOR DE GRIMALDO, fue este mismo año para Tierra Firme.
MARCIAL DE CONTRERAS, presbítero de la Diócesis de Sevilla, vecino de Lepe, hijo de Hernando Esteban y su mujer Ángela Rodríguez. Que marchó en 1554 a Nueva España, llevando como criado a BARTOLOME DEL RIO, soltero, vecino y natural de Sevilla, hijo de Francisco de Molina el Viejo y de Isabel del Río
En 1555 tenemos un grupo muy numeroso compuesto por el DOCTOR BRAVO, natural y vecino de Lepe, hijo de Hernán Ramírez y de Isabel Brava, que fue de oidor a Nueva España y que iba acompañado de su mujer, ANA PEREZ, y a quienes acompañaban como criados los vecinos de Lepe, el también hijo de Hernán Ramírez e Isabel Brava, FRANCISCO RAMIREZ, soltero; ANTON TENORIO, hijo de Alonso Montano y de Teresa Lorenzo, soltero y varios procedentes de otras poblaciones.
Por factor del mercader sevillano Pedro Ramírez, fue a Tierra Firme, ALONSO MARCOS, vecino y natural de Lepe, hijo de Rodrigo Marcos y de Isabel Valbuena.
A final de 1555 fueron autorizados para viajar a Nueva España, ISABEL RODRIGUEZ, natural y vecina de Lepe, hija de Gonzalo Gómez Toscano y de Catalina Martín, la Serrana, viuda; con sus hijos MARIA ALVAREZ Y GASPAR DE LOS REYES y CATALINA MARTIN, mujer de Fabián de Espino, residente en Nueva España.
                                               Angel Custodio Rebollo Barroso

domingo, 3 de marzo de 2013


JUAN DIAZ DE SOLIS

Hace poco y no recuerdo por qué, salió el nombre del descubridor del Rió de la Plata y se mantiene en nebulosa el lugar de nacimiento Juan Díaz de Solís. Hay quien dice que tuvo que ser lepero, porque sus padres y sus hermanos, además de su segunda esposa eran naturales de Lepe y es extraño que naciese en Lebrija como dicen los libros españoles. Y digo los libros españoles porque en los portugueses y en los de autores chilenos, le asignan el País vecino como el lugar donde vio por primera vez la luz. Esta disparidad de información, hizo que me interesase mas por este personaje que tanta importancia tuvo en la aventura americana y me hice de artículos y libros biográficos, tanto españoles como portugueses y el editado por uno de sus mejores biógrafos el chileno José Toribio Medina, estudiando el tema al máximo, pero con el mismo resultado final que no se aclara el lugar de nacimiento de Juan Díaz de Solís. Hay quien dice que lo de Lebrija se debe a que, por sus servicios a la Corona, Díaz de Solís recibió unos terrenos en Lebrija y que esto hizo que sus visitas a la población sevillana fueran frecuentes. La verdad es que yo no he averiguado donde nació, pero he conocido la vida de este hombre que fue muy apasionante. Hay un periodo de oscuridad que es el que estuvo huido porque se le achacaba con el crimen de haber quitado la vida a su primera mujer, que lo desvincula de Lisboa donde residía y lo transfiere a Castilla donde aparece al cabo de unos años y que creo que influyó mucho en su actividad profesional, pero es algo que, como digo, esta en la oscuridad y es difícil que ahora se pueda averiguar.
                                                        Angel Custodio Rebollo

sábado, 2 de marzo de 2013

Los hermanos Cermeño 

Hay personas a quienes por circunstancias y los convencionalismos hacen que las “olvidemos” y este es el caso de los hermanos Cermeño, Diego y Juan, hijos de Rodrigo Costa y ambos naturales de Palos de la Frontera. Los dos hermanos fueron a la aventura americana, pero cada uno tuvo un final muy diferente. Diego, junto con Juan Escudero que era alguacil en Baracoa en 1515 detuvieron y apresaron a Hernán Cortés. Cortés lo consideró un motín y no lo olvidó, por lo que tan pronto fue liberado hizo que tanto Juan Escudero como Diego Cermeño fueran condenados por conspiración contra él y en 1519 fueron ahorcados, algo que después confirmaron varios testigos (Navarrete, Guzmán y Vázquez de Tapia) en posteriores declaraciones, que afirmaron haberlos visto colgados. Juan Cermeño era piloto y tuvo muy buen comportamiento navegando durante bastante tiempo. Estuvo presente como testigo en el juicio de Bernardino de Santiago. Le fueron concedidas las encomiendas de Acuitlapan y de Coatlan y se quedó a vivir en Nueva España. Otro caso que también acabó mal fue el del sevillano Juan Escobar, un buen soldado que fue colgado por violar a una mujer casada. Para mantener la disciplina y aunque todos los españoles eran muy necesarios, ya que las enfermedades , las deserciones y los enfrentamientos con los indios mermaban mucho el número de tropa, Cortés se veía obligado a tomar estas decisiones Angel Custodio Rebollo